Las energías renovables, debido al gran potencial que presentan, están llamadas a jugar un papel fundamental en el futuro energético europeo. Su uso tiene un gran valor estratégico para Europa, que está realizando un esfuerzo importante tratando de lograr que el sistema energético sea limpio, seguro y eficiente, garantizando al mismo tiempo que la UE ejerza un liderazgo industrial en tecnologías de energía bajas en emisión de carbono.
Los archipiélagos que componen la Macaronesia tienen unos problemas energéticos comunes, cuyas soluciones podrían ser exportables al África Occidental para contribuir al desarrollo energético sostenible de estas regiones con economías en expansión, maximizando la implementación del uso de EERR. El sistema energético en Canarias y Madeira, se caracteriza por una alta dependencia energética del exterior. Estos territorios carecen de recursos energéticos convencionales, sin embargo, los recursos renovables son abundantes, especialmente la energía solar y del viento. Esta problemática se ve replicada en cualquier red débil, como puede ser la de Cabo Verde y Mauritania.
El Proyecto ENERMAC (Energías Renovables y Eficiencia Energética para el Desarrollo Sostenible de África Occidental e Islas de la Macaronesia) persigue la búsqueda de soluciones que permitan superar las barreras existentes a la incorporación de tecnologías de energías renovables y desarrollar estrategias encaminadas a la maximización de las renovables en el mix energético de los archipiélagos de la Macaronesia y países en expansión del África Occidental. Para esto, se persigue acometer la maximización de la penetración de EERR en redes débiles, promoviendo las grandes líneas sobre las que se va actuar a nivel energético: Planificación Energética, Uso Racional de la Energía y Análisis de Redes y Microrredes.
Con esto, es imprescindible la creación de una red de excelencia en el ámbito de las EERR y la eficiencia energética, donde se comparta el conocimiento generado entre las entidades participantes, fomentando la formación y el intercambio del personal investigador, todo ello con la imprescindible cooperación de los diferentes organismos competentes en las regiones, a fin de aplicar el know-how adquirido de manera colaborativa con el objetivo de resolver los problemas energéticos de las regiones implicadas.